De pequeño aprendí a tocar la guitarra que había por casa para imitar a mi hermano, que era mi ídolo doméstico. Ahora él se sienta a escucharme y ese es uno de mis logros vitales. Después me enamoré de los libros y la poesía. Cuando descubrí a los cantautores quedé atrapado por esa combinación mágica, y supe que ése sería mi camino.
Nacieron canciones, nacieron discos. Me acompañaron grandes músicos y pisé escenarios de bares, teatros y salones. La música me llevó a lugares únicos y me permitió hacerme un hueco en algunos corazones.
Mis letras hablan de la realidad que me rodea. La disfrazo de Funk, de Bossa, de Flamenco, de tango… y es así como consigo entenderme. A veces, las canciones dejan de ser mías y vuelan solas. Ése es el mejor momento.
- Segundo premio en el III Concurso de Cantautores de Ferreries, Tortosa (Tarragona)
- Tercer premio en el III Certamen Nacional de Cantautores de Berlanga.
- Finalista en el Certamen Internacional de Cantautores “Abril para vivir” en las ediciones 2015 y 2016.
- Finalista en el 15º Concurso de Cantautores de D’Horta-Guinardó (Barcelona).
“Lo que me salva son los tendones y las vértebras del sonido,
que a veces ponen cuerpo al calor de mi aliento. “